Ya muchos conocen la web frasesbonitas.online por la enorme utilidad que presta cuando queremos improvisar una forma bonita de decir las cosas, de manera tal, que podemos recibir a cambio una respuesta positiva a nuestras pretensiones en el sitio oportuno cualquiera que se nos ocurra al instante.
Pero, ¿De qué estamos hablando? ¿Cuales pretensiones? Y ¿a qué tipo de utilidades nos referimos? Simple! Todas aquellas ocasiones donde nos sentimos en la necesidad de expresarnos pero no encontramos las palabras idóneas para trasmitir eso que llevamos por dentro y nos quedamos mudos dejando pasar una oportunidad de oro, la que posiblemente pudiese cambiar el rumbo de nuestras vidas.
Cada uno de nosotros como persona tiene su propia historia, en su propio mundo y con su propio entorno rodeado de otros, con los cuales convivimos e interactuamos diariamente, desarrollando diversidad de relaciones cuando aun sin desearlo nos envuelven espontáneamente. Y, nos vemos de repente socializando con toda clase de personas, es allí el momento en el cual se producen chispas de contacto. Chispas! capaces de maravillarnos, de inquietarnos y provocarnos sensaciones de plenitud, donde deseamos decir frases bonitas, sencillas pero profundamente significativas para la otra persona que comparte ese contacto. Y, que al decirlas espontáneamente y naturalmente pueden seducir a esa otra persona logrando sacar de su rostro una hermosa sonrisa o cualquier gesto de agrado que nos demuestra que ha quedado complacida.
Una frase bonita puede llegar a ser la llave que abre todas las puertas. ¿Acaso, no da más frutos sembrar para cosechar?
¿A quien y cuando dedicar una frase bonita?
Usemos un ejemplo muy sencillo que a cualquiera de nosotros le puede suceder:
Supongamos que, desde hace tiempo nos gusta una vecina que vemos pasar todos los días frente a nuestra casa pero que nos sentimos incapaces de romper el hielo por temor a una reacción contraria a lo que deseamos, sin embargo, pero si nos dejamos llevar por ese instinto que todos tenemos desde niños pero que rara vez le prestamos atención y damos el paso número uno, que es perder el miedo, luego actuamos y hablando cortésmente, le decimos:
¡Sé que Dios te protege porque pareces un ángel, pero si me permites acompañarte sentiré que me ha ganado el cielo! ¡Imagínense!! Les aseguro, que cada día que ella pase por allí esperara una nueva frase bonita.
¿A quien no le gusta escuchar frases bonitas?, intentemos ser nosotros mismos conociéndonos mas y saber de lo que somos capaces de decir, apoyándonos a través de paginas como en la la web frasesbonitas.online que básicamente se convertirán en inspiración y una excelente herramienta de buen provecho para nuestro aprendizaje y no solamente para seducir, esto va mucho más allá de eso. Se trata de la vida en sí, se trata de tener inteligencia emocional para reconocer y transmitir aquello que sentimos, del trato que merecen las personas que nos rodean al darles un valor agregado que haga sentir a todo ser humano lo importante que es para nosotros.
Desde un ¡por favor! hasta un ¡Gracias! Tiene un valioso significado con la entonación adecuada pero más valiosa es si le damos ese toque unipersonal que le da autenticidad a las palabras y es allí donde se convierte en una frase bonita porque sale del alma y se da con el corazón, se acompaña de una profunda mirada y el espíritu del amor.
No existen reglas, ni moldes, ni mucho menos tecnicismos. Existe la verdad, la sinceridad, la honestidad, la buena intención, todas son ingredientes esenciales para que una frase sea realmente bonita y eso solo se logra sintiendo lo que se dice.
La paz del alma es el espejo del corazón y se refleja en la mente, un espíritu alegre hace que broten cientos de palabras que forman frases bonitas pero más bonitas es cuando tenemos un motivo que nos hace decirlas y esa es la inspiración que materializa pensamientos, sentimientos e impulsos. Los impulsos que nos arrancan las palabras de los labios y nos provocan la espontanea expresión de una frase bonita.
No guardemos secretos en los labios, dejémoslos escapar, que broten por si solos porque allí está atrapada nuestra esencia, nuestra picardía o ingenuidad. Recordemos y no olvidemos un importante detalle, los demás no quieren oír frases aprendidas, quieren escuchar aquello que los atrae de nosotros, lo propio, por muy tonto que parezca debe ser lo autentico, lo que deja nuestra propia huella, nuestra marca, lo que no van a encontrar en las otras personas.