El aislamiento de la reina Isabel II por la pandemia del coronavirus cumple con importantes protocolos para evitar que quede expuesta a la enfermedad.
Para lograr proteger a la monarca, ella permanece aislada en el Castillo de Windsor donde estará por un tiempo indeterminado.
Estricto aislamiento de la reina Isabel
No es una tarea fácil cumplir con la protección de la reina Isabel II, la longeva monarca del Reino Unido, en medio de una mortal pandemia.
Por esta razón ella dispone de un equipo de 22 personas que conforman un protocolo que fue denominado como la “burbuja real”.
A pesar de la cuarentena, la monarca respeta las rutinas diarias y se mantiene cumpliendo sus actividades, entre las que destaca su tiempo para cabalgar.
El momento de su cabalgata lo cumple en su pony negro, llamado Carltonlima Emma, gracias al dedicado trabajo de su “fiel caballerizo”, Terry Pendry.
Isabel II cabalgando por los jardines de Windsor junto a su caballerizo, Terry Pendry. FOTO: La Nación.Por las mañanas la reina viste de pantalones y botas de montar, además de un sobretodo impermeable, con lentes de sol y un pañuelo que cubre su cabeza.
Sus 94 años no le impiden seguir disfrutando de su hobby y la cuarentena no la obligaría a despedirse de los caballos, aunque mantiene las restricciones pertinentes.
La burbuja de la reina de Inglaterra
Ahora, la reina acude sin compañías para poder montar, el único que tiene permitido el acceso es Pendry, quien prepara los caballos de forma anticipada.
Además de Pendry otra veintena de empleados acompaña a Isabel, este equipo denominado la burbuja real se encarga de atender todas sus necesidades y protegerla.
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