El 72 % de venezolanos califica como fraudulenta la educación venezolana por las fallas, tanto técnicas como metodológicas a la hora de enseñar a los alumnos más jóvenes. A este problema se suma las limitaciones en el acceso a internet, las fallas en la energía eléctrica y la pobreza.
El estudio llevado a cabo por Centros Comunitarios de Aprendizaje (CECODAP) en su informe sobre la educación a distancia en Venezuela, revela que el 72 % de la población venezolana ve con malos ojos como el gobierno ha llevado a cabo la educación remota durante la última etapa del año escolar.
Varias organizaciones sin ánimo de lucro manifestaron que el resultado de la investigación de CECODAP es la consecuencia de la precariedad que se viene arrastrando desde comienzos de la crisis política iniciada en el año 2010.
Según información del sitio web educativo Educalinkapp, cerca del 80 % de venezolanos vive en pobreza extrema, por lo tanto cuentan con equipos por debajo de las especificaciones técnicas requeridas por los desarrolladores de plataformas educativas. A eso se suma el acceso inexistente a internet del 36 % de su población, quienes han quedado excluidos completamente del ciclo escolar.
A pesar de que más de un tercio del país no cuenta con conexión a internet, en el informe de CECODAP se revela que el 87 % de encuestados consideran esta herramienta como la mejor para la educación a distancia, por encima de otros métodos más accesibles como la radio y la televisión. Este resultado se puede interpretar como un sentimiento de deseo, pues a pesar de no contar con herramientas tecnológicas, la población reconoce la importancia que tienen estos en el mundo moderno.
El nivel de conectividad sigue siendo uno de los más bajos de la región, con una estadística de 32 de cada 100 hogares con acceso a internet fijo, según los datos de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (CONATEL). Además el 80 % de conexiones se realiza a través de un dispositivo móvil, aunque solo el 56 % de venezolanos cuenta con un teléfono inteligente.
El inicio del tercer año escolar en pandemia pondrá en evidencia el retraso de algunos niños a causa de las precariedades que viven día a día. Algunas organizaciones han propuesto iniciar brigadas de evaluación a zonas remotas donde la situación cada vez es mayor.
El problema de los profesores es otro tema estancado, que hasta el mismo Comando Regional Sindical de Educadores pidió a los maestros no volver a sus puestos de trabajo a causa de sus bajos salarios, que en la mayoría casos no superan los 3 dólares mensuales.