El empresario Juan Carlos Briquet Mármol es el responsable de varios proyectos de inversión tanto en Venezuela, como en otros países de Latinoamérica y Europa. En el siguiente texto, el también especialista en finanzas nos comparte su opinión, dándonos luces sobre lo que está pasando con la economía de Venezuela en el 2022.
Hay que reconocer los signos de recuperación de ciertos sectores de la economía, sin embargo, no todo es bueno, comenta el empresario Juan Carlos Briquet Mármol. Ha habido varios problemas como el aumento en el costo de las materias primas importadas, el espiral inflacionario, la falta de crédito y por supuesto, el desorden de una dolarización hecha por de facto y no como parte de un programa de estabilización macroeconómica.
Definitivamente, hay algunas buenas señales de recuperación económica en Venezuela
En los últimos meses, la economía venezolana ha empezado a dar señales de vida, gracias al aumento de los precios del petróleo por la guerra en Europa del Este y por los efectos positivos de la dolarización. Esto ha contribuido a impulsar el PIB y a proporcionar un alivio muy necesario al pueblo venezolano. Sin embargo, la situación económica del país dista mucho de ser ideal. La inflación y el desempleo siguen siendo elevados. Sumado a esto, muchas empresas siguen luchando por mantenerse a flote. La situación es especialmente grave en las zonas rurales, donde los niveles de pobreza se disparan.
El déficit fiscal de este año asciende a 11.500 millones de bolívares, lo que equivale a un aumento del 7% respecto al año pasado. Además, la tasa de depósitos en bancos privados cae un 12%. El nivel de créditos es muy bajo para reactivar una economía que hace unos años era de más de 100 mil millones de dólares.
En un informe titulado »La recuperación económica de Venezuela: Un panorama más halagüeño, pero un largo camino por recorrer», el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) señala que, con la estabilización de la economía, Venezuela está bien posicionada para entrar en una fase de fuerte crecimiento y desarrollo. Sin embargo, los expertos también han instado a la cautela, advirtiendo que la recuperación aún podría tardar años porque se requieren altos flujos de capitales que no llegarán a menos que el país transite a una estabilización política.
La economía venezolana y la recuperación tibia
Según Briquet Mármol, a medida que la economía venezolana comienza a mostrar signos de mejora, muchos tienen la esperanza de que el país vuelva pronto al estado anterior a la crisis. Sin embargo, el experto financiero advierte que el camino hacia la recuperación será largo y difícil.
Briquet señala que no se deben precipitar los análisis.
La economía ha caído más de 80% desde 2014 y para poder volver a tener los niveles de empleo e inversión que había antes que empezara la crisis, hace falta mucho por recorrer. Otro punto que resulta ser relevante es el plan de atraer inversión extranjera que ha lanzado el gobierno. Analistas son cautelosos con este, pues las condiciones en términos de infraestructura y servicios están muy deterioras para recibir capitales internacionales en Venezuela.
A pesar de la recuperación económica, todavía existen numerosos problemas, entre ellos la crisis humanitaria que se ha convertido en una realidad. La situación humanitaria sigue siendo preocupante por la falta de un sistema de salud, así como de ingresos para cubrir la canasta alimentaria. Los flujos migratorios no se detienen a pesar de la leve mejoría de la economía. Por eso las imágenes de venezolanos cruzando la selva del Darién se han hecho recurrente.
Factores que están influyendo en un pequeño despertar económico en el país
Este año, se espera, según Briquet Mármol, que la economía venezolana se expanda más de un 8% después de experimentar severas contracciones desde 2016 y 2017. Esta expansión pondrá fin al ciclo recesivo iniciado en 2014. Según las estimaciones, el PIB de Venezuela fue un 80% menor en 2020 que en 2012.
Las restricciones al comercio de divisas se han levantado y esto sin duda ha tenido un efecto positivo en el comercio. Así como otros expertos, Juan Carlos Briquet cree que este año podríamos aspirar a un crecimiento de entre el 8% y el 11%, pero dependerá de si los precios de las materias primas se mantienen altos.
Un País que buscar recuperar el liderazgo en el sector petrolero
Uno de los sectores de mayor crecimiento ha sido el energético, particularmente y con mayor fuerza el petrolero. Hay una previsión optimista para la economía venezolana que se basa en la combinación de los altos precios del petróleo provocados por el convulso mercado de crudo internacional y el aumento de la producción de hidrocarburos. En efecto, según las cifras de la OPEP, la producción petrolera de Venezuela en 2021 alcanzó los 636.000 barriles diarios, lo que implicó un aumento del 11% con respecto a la cifra de 569.000 barriles diarios de 2020.
De hecho, se espera que este incremento en la producción sea mayor a los 800.000 barriles por día. Todo dependerá si el gobierno de Estados Unidos decide flexibilizar las sanciones petroleras y permitir que las compañías de hidrocarburos vuelvan a operar en los campos venezolanos.
¿Qué está haciendo el gobierno venezolano para ayudar a sus ciudadanos?
Las ayudas económicas que ofrece el gobierno son insuficientes para poder palear el hambre y la pobreza. Una de las características principales de esta Venezuela postdolarización es la inequidad social. En el este de la capital venezolana se levantan grandes edificios y restaurantes, pero en el resto de la ciudad hay un país bregando para comer.
Las brechas sociales se han profundizado en medio del actual contexto, pues aunque ahora hay productos y ha mejorado la distribución de alimentos, no todo el mundo tiene para pagar los precios de estos. Además, la inflación no da tregua. A pesar de que ha habido una dolarización, la inflación no se ha detenido y devora, aunque con menor intensidad, el poder adquisitivo del trabajador venezolano.
Una de las medidas que está haciendo el gobierno, es promover las exportaciones. Pero la verdad es que existe muy poco margen de maniobra por la falta de dólares para reactivar a otra velocidad el aparato productivo.
Para Juan Carlos Briquet Marmól interpreta el futuro de la economía Venezolana
A pesar del deterioro económico actual, Briquet Mármol ve con buenos ojos el hecho que el gobierno norteamericano haya señalado que está dispuesto a aliviar las restricciones a Venezuela. Por otro lado, Colombia se prepara para restablecer relaciones con el país, estos serían buenos pasos hacia una apertura económica en Venezuela.
Estas son buenas noticias para la nación sudamericana, ya que abre nuevas oportunidades para los inversionistas que quieran ser parte de una nación. Sin embargo, hay que ser cauteloso porque se trata de un entorno muy volátil, con problemas estructurales como alta inflación, desempleo e inseguridad jurídica. Venezuela es una nación que debe trabajar muy duro para integrarse plenamente dentro de la economía de América Latina y la competencia global.
El economista Venezolano, Juan Carlos Briquet Mármol, considera que un ambiente saludable de inversión, generará estabilidad, ayudará a impulsar el PIB y de seguro proporcionará un alivio muy necesario para el pueblo venezolano.
